Agricultura sin suelo

Buscando nuevas formas de complementar la oferta de alimentos en Estados Unidos y al mismo tiempo reducir el impacto ambiental de su producción.

Farm.One's Tribeca, NYC Flagship Farm.

El Instituto de Mercados de World Wildlife Fund (WWF) anunció hoy un Análisis de Innovación que examina el impacto ambiental de varios sistemas de agricultura de interior y sin suelo. Estos sistemas incluyen la hidroponía, la acuaponía y la aeroponía en invernaderos y entornos verticales. A gran escala, este método de agricultura puede tener impactos positivos en el medio ambiente conforme disminuye la presión que se ejerce en el suelo, la biodiversidad, en hábitat naturales y en el clima. Sin embrago, la industria también enfrenta ciertos obstáculos que le impiden avanzar más allá de su especialización actual: la producción de verduras de hoja verde de alta gama.

“La agricultura de interior y sin suelo puede tener un impacto significativo en la producción a futuro de algunas categorías de alimentos. Actualmente estamos analizando si son o no son viables, tanto económica como ambientalmente, para producir más frutas y vegetales a gran escala en estos sistemas”, indico Julia Kurnik, directora de innovaciones de start-ups del Instituto de Mercados de WWF. “Si podemos resolver los obstáculos y hacer de esto una realidad, estamos hablando de un gran cambio para las comunidades que no tienen acceso a verduras y frutas frescas durante la mayor parte del año, o que se encuentran en lugares donde no hay seguridad de alimentos”.

Estos sistemas son muy eficientes respecto al uso de suelo y del agua, pero la huella ecológica de la energía utilizada para la iluminación y enfriamiento pueden -dependiendo de la fuente local de energía- incrementar la huella ecológica en general. La agricultura de interior y sin suelo es también mucho más cara que la agricultura tradicional. Sin embargo, varias innovaciones que actualmente están en desarrollo podrían cambiar considerablemente el costo y la huella ecológica y alterar drásticamente la viabilidad de esta industria, en el mediano y largo plazo. Estas incluyen avances en la iluminación, fibra óptica, inteligencia artificial y aprendizaje automático, edición genética, energías renovables, coubicación y cogeneración, y el manejo de desechos y reciclaje.

Farm.One's Tribeca, NYC Flagship Farm.

Farm.One's Tribeca, NYC Flagship Farm.

La siguiente fase del proyecto tiene como objetivo ayudar a resolver los obstáculos que se han identificado en la fase 1 de la investigación. WWF explorará el uso de bienes activos varados –inversiones grandes de infraestructura tales como plantas de generación eléctrica y centros de distribución que se han depreciado en valor, pero continuaran siendo utilizados con una capacidad limitada en los siguientes 10 a 50 años– y construir una coalición robusta de socios locales, incluyendo The Yield Lab Institute, para lanzar un sistema piloto de agricultura en San Louis, Misuri.

“En The Yield Lab Institute, trabajamos junto con World Wildlife Fund y McDonnell Foundation, y estamos muy orgullosos de ser parte de este equipo distinguido de voluntarios comunitarios que están trabajando para traer a la localidad alimentos producidos al interior y en forma sustentable en el área de San Louis”, dijo Thad Simons, Cofundador y Director General de The Yield Lab Institute. “Esto también impulsará la innovación entre nuestros empresarios de tecnología agrícola y con la intención de dar acceso a alimentos nutritivos a las comunidades desatendidas de nuestra zona”.