Mejorando la gestión de los residuos plásticos

Es difícil imaginar que el equivalente en plástico a un camión de volteo se vierte en nuestros océanos cada minuto, acumulando hasta 11 millones de toneladas métricas de plástico cada año. Y resulta aún más difícil imaginar que, aunque el 85% de los estadounidenses están frustrados por esta realidad, aún no contamos con políticas públicas a nivel nacional para hacer frente al asfixiante problema de los desechos plásticos.

Una nueva encuesta de opinión pública revela que, con mayor frecuencia, las personas de Estados Unidos están exigiendo un cambio fundamental en la forma en que usamos, reutilizamos, reciclamos e interactuamos con los empaques, especialmente el plástico.

Pero, ¿qué podemos hacer para resolver este problema, cuando gran parte de nuestra vida diaria depende del plástico?

Empecemos por reevaluar qué productos y empaques son realmente necesarios; comprender qué empaques pueden fabricarse para ser reutilizados; e incentivar el uso de contenido reciclado. Solo entonces, cuando reduzcamos, reutilicemos y reciclemos, podremos crear un futuro en el que nuestros empaques y productos ya no terminen en la naturaleza.

Necesitamos que los creadores de políticas públicas y los líderes empresariales adopten medidas innovadoras para ayudarnos a hacer la transición de nuestra relación actual y lineal con el plástico ("tomar-usar-desperdiciar") a una circular. Las economías circulares ayudarán a frenar nuestra demanda de nuevo plástico virgen garantizando que los productos de plástico de los que dependemos todos los días se reutilicen y reciclen, y que los valiosos recursos que tomemos del planeta para fabricar los materiales no se conviertan en basura que contamina. De hecho, tres cuartas partes de todos los estadounidenses apoya el cambio hacia una economía circular: preferirían productos de plástico reutilizables a los desechables, y comprar artículos con la mínima cantidad de empaque de plástico. También están dispuestos a reciclar más de sus propios residuos plásticos.

Para lograr un futuro circular necesitamos políticas sólidas que responsabilicen a los productores por el impacto ambiental de sus productos y eliminen la presión que hay sobre los consumidores. Este concepto, conocido como Responsabilidad Extendida del Productor (REP), no es solo una prioridad ambiental; también beneficia a las empresas. Junto con la American Beverage Association, hemos creado un consenso sobre cómo debemos construir la REP en Estados Unidos. Y, a través de OneSource Coalition, también estamos reuniendo a empresas y ambientalistas para decirles a los legisladores que estamos listos para hacer realidad la REP como parte de un triple enfoque para las políticas de los desechos plásticos, la justicia ambiental y las soluciones internacionales. Hemos identificado una lista de materiales problemáticos e innecesarios a través del Pacto de Plásticos de Estados Unidos que puede ayudar a guiar el camino hacia la REP.

No toda la contaminación por plásticos proviene de los empaques. Cada vez más, la contaminación por plásticos proviene de las plantas de producción y cada vez existe más evidencia de que los microplásticos ingresan al medio ambiente de formas desconocidas. Necesitamos orientar nuestras políticas con principios de justicia ambiental, donde creamos y usamos productos con un impacto mínimo en las comunidades locales y el medio ambiente. Durante mucho tiempo, las comunidades más vulnerables y las personas que enfrentan barreras sociales y que a menudo residen en los lugares más afectados por la contaminación por plásticos han vivido en carne propia los impactos de una economía plástica en constante expansión.

Todas estas prioridades pueden funcionar juntas. De hecho, solo juntos podemos minimizar todos los impactos de la producción, el uso, la reutilización, el reciclaje y el descarte de los plásticos. Nuestra nueva guía de políticas públicas en torno a una economía circular para el empaque en Estados Unidos evalúa los cambios necesarios en nuestros sistemas y conecta estas soluciones para crear un futuro en el que los plásticos ya no lleguen a la naturaleza.

Tú puedes ayudar. Pídele al Congreso que apoye la Ley de Liberación de la Contaminación por Plástico (Break Free from Plastic Pollution Act).