Obtener acceso al agua potable en medio de la pandemia

El equipo de construcción construyendo un nuevo sistema de agua en Honduras.

El agua es un recurso esencial que muchos damos por hecho. El agua es especialmente importante en medio de la pandemia del COVID-19 ya que nos permite realizar acciones básicas y fundamentales para prevenir la propagación del virus: practicar el constante saneamiento y lavado de manos. Ahora, dos comunidades en la parte norte de Honduras tienen acceso a este recurso vital. Debido a infraestructura vieja y mal planificada, los habitantes de Laguna de Bañaderos y Santa Elena, dos comunidades en la cuenca del río Manchaguala, en la Reserva de El Merendón, al norte del país, carecían de acceso seguro al agua potable en sus hogares a pesar de contar con muchas fuentes de agua disponibles en el entorno a su alrededor.

Three men stand around a cement structure in the forest while building a new water system

WWF-Mesoamérica, con el apoyo de la Coca-Cola Foundation (TCCF), trabaja en estrecha colaboración con las comunidades para la conservación y manejo del agua en Honduras, Guatemala y Belice. Al enterarse del problema del acceso al agua en estas comunidades, los equipos locales entraron en acción. 

Durante los meses siguientes, WWF trabajó para determinar las razones por las cuales había fallado el sistema de agua existente en las comunidades e implementar una solución permanente. Los estudios indicaron que los sistemas originales de agua potable eran ineficientes: estaban construidos con materiales de mala calidad y no podían proporcionar agua en la cantidad y calidad adecuadas.

WWF-Mesoamérica, con el apoyo técnico de una empresa de ingeniería civil, impulsó un proyecto para reemplazar dichos sistemas de agua. Las comunidades aportaron la mano de obra necesaria para ejecutar las obras de construcción bajo estrictas medidas de seguridad para reducir los riesgos asociados con la propagación del COVID-19.

A girl smiles into the camera as she washes her hands under an outdoor faucet

Debido a la pandemia, el proyecto se suspendió inicialmente durante un mes. Sin embargo, pasados 30 días, los líderes de ambas comunidades escribieron a WWF solicitando continuar con el trabajo.

Sabiendo lo vital que es el acceso al agua para estas comunidades, WWF acordó reanudar las actividades bajo estrictos protocolos de bioseguridad para todos los trabajadores del proyecto. WWF proporcionó materiales de sanitización, equipo de seguridad y capacitación. También se indicaron estrictas medidas de distanciamiento social a los representantes de la comunidad para reducir los riesgos relacionado con la propagación del COVID-19.

El proyecto, ahora finalizado, proporciona un eficiente sistema de agua potable construido para durar a largo plazo, beneficiando a 400 personas en más de 100 hogares en ambas comunidades.

WWF-Mesoamérica ha llevado a cabo proyectos de acceso al agua como este en Honduras, Guatemala y Belice con el apoyo de TCCF. A través de este trabajo, las comunidades participan en la conservación de las cuencas hidrográficas y comprenden el vínculo entre la conservación y el impacto positivo que puede tener en la cantidad y calidad del agua a largo plazo. 

Las comunidades ahora están completamente involucradas en la conservación del ecosistema del que dependen. Este último proyecto es una prueba más de que, incluso frente a la adversidad, trabajar juntos puede beneficiar la salud tanto de las personas como del planeta.

Un nuevo tanque de agua proporciona el acceso seguro a agua limpia para las comunidades hondureñas.